
Posmodernidad en cuatro actos
Uno
He visto al cielo beber agua
mientras adolescentes se desmayan
ante un ídolo con guitarra de sal
y una multitud revienta sus cuerdas bucales
cuando una bola de cuero entra en una red
Dos
He visto a la montaña
besar constelaciones
mientras el televisor y la internet
absorben cabezas
como el niño de la calle aspira cola
Tres
He visto al mar a la luna y al sol
leyéndose el tarot
mientras un puñado de hombres
inventan armas
para mantener su reinado
de plomo y de papel
Cuatro
He visto al mundo desgarrarse
en descarnada hilaridad
mientras el hombre
se amotina en los templos
para inventar una sexta religión
Desierto

No hay pan
porque no hay mesa
No hay mesa
porque no hay techo
No hay techo
porque no hay muros
No hay muros
porque no hay pueblo
y…
¿Dónde está el pueblo mi general?
Salmo 91

Así para qué sirve la religión…
Luis Vidales
Como un guardián acechando tras la puerta
en un humilde hogar
El salmo 91
Como una ahogada letanía
en las noches aciagas de los campos
El salmo 91
Como un exquisito menú que cuelga
en los negocios de los usureros
El salmo 91
Como bandera que tremola victoriosa
en el parabrisas de los autos
El salmo 91
Como un fino estuche guardado
en las carteras de las damas de caridad
El salmo 91
Como un talismán cualquiera encontrado
en el bolsillo ensangrentado de la víctima
El salmo 91
Arnubio Roldán Echeverri. Medellín, Antioquia, 1964.
El poema alza vuelo para nombrar lo inadvertido, una hoja que reverdece entre los escombros, un pueblo devastado que esgrime la dignidad por bandera, el sutil instante donde tiene lugar el asombro, la pregunta sin descanso. El poema traza, pone en evidencia la delgada línea entre el estruendo y el silencio más atronador, entre el horror y la belleza de la condición humana. La poesía, ojo avizor de días y noches a golpe de memoria.
Los poemas aquí publicados hacen parte del libro No es más. QUITASOL. Fondo Editorial, 2019.